Pasando desapercibida a los medios, la Fundación Heritage —un centro de estudios considerado ampliamente como el motor intelectual de la agenda de política exterior de la administración Trump— ha publicado un informe que parece delinear el enfoque futuro del presidente hacia Irán. El documento de seis páginas aboga por el fin de las negociaciones nucleares y la búsqueda de ataques conjuntos entre Estados Unidos e Israel contra la infraestructura nuclear iraní. Aunque se presenta apenas como un análisis político, el informe se lee más como un lanzamiento suave para una estrategia de guerra. Heritage ha desempeñado durante mucho tiempo un papel predictivo en la política exterior de la era Trump. Sus informes y recomendaciones a menudo se incorporan a la doctrina oficial, especialmente en asuntos relacionados con Israel e Irán. Eso es lo que hace tan significativo a este documento, titulado "Erradicar el programa nuclear de Irán": no solo describe lo que Washington debería hacer, sino también cuándo y cómo debería hacerlo. Comienza con un flagrante error histórico: "La República Islámica de Irán ha tenido un programa nuclear desde la década de 1950, con una dimensión militar que comenzó a finales de la década de 1980". Irán fue una monarquía hasta 1979, cuando una revolución popular provocó un cambio de liderazgo. Sin embargo, sus prescripciones resultan más preocupantes. Los autores respaldan la postura actual de la administración Trump, insistiendo en que Estados Unidos respete la línea roja establecida por el enviado para Oriente Medio, Steve Witkoff: que Irán no podrá retener ni siquiera el 1% de su capacidad de enriquecimiento . Teherán ha descartado esta exigencia como imposible. El informe argumenta que solo una amenaza creíble de acción militar puede forzar concesiones iraníes. Si esto fracasa, afirma, un ataque conjunto israelí-estadounidense es viable y necesario. Los autores recomiendan fijar una fecha límite firme para las negociaciones antes del 25 de octubre, fecha en que expirará la cláusula de reimposición de sanciones del Plan de Acción Integral Conjunto (PAIC). Sin embargo, expertos familiarizados con la región han advertido que los ataques contra las instalaciones nucleares iraníes retrasarían, en el mejor de los casos, el programa temporalmente y podrían provocar una importante repercusión regional. En abril, analistas militares estadounidenses e israelíes declararon que dicha acción podría derivar en una guerra a gran escala.
Sin embargo, la Fundación Heritage asegura a sus lectores que Estados Unidos e Israel tienen la capacidad de "poner fin de forma efectiva al programa nuclear iraní sin causar bajas civiles significativas" y "disuadir represalias significativas". Estas afirmaciones no solo carecen de fundamento, sino que se contradicen con datos recientes del campo de batalla. El informe afirma, sin pruebas, que las defensas aéreas de Irán han sido "diezmadas". También afirma que Hezbolá ha sido "decapitado" y Hamás "desmantelado". En realidad, las estimaciones israelíes sitúan la fuerza activa de Hamás en aproximadamente 40.000 efectivos, sin cambios desde antes del 7 de octubre. Hezbolá sigue operativo. Y Ansar Allah (los hutíes) continúa lanzando ataques con misiles casi a diario a pesar de meses de bombardeos estadounidenses y aliados. Esto no es un mero error de análisis. Es una guerra narrativa. Al presentar a actores regionales clave como ya neutralizados, el informe de Heritage construye un escenario fantástico en el que la guerra parece de bajo coste, alta recompensa y prácticamente inevitable. Lo más alarmante no son los errores, sino el patrón. El informe se hace eco de los argumentos de centros de investigación proisraelíes como el Instituto Washington para la Política del Cercano Oriente (WINEP), que recientemente afirmó que la "debilidad actual" de Irán representa una "oportunidad única" para atacar. Juntas, estas voces están forjando un consenso basado en suposiciones profundamente erróneas. La Fundación Heritage no solo especula. Está dando señales. Foto principal | El presidente Donald Trump habla en la reunión anual del Club de Presidentes de la Fundación Heritage en Washington el 17 de octubre de 2017. La Fundación Heritage, autora del controvertido plan del Proyecto 2025, publicó recientemente un informe de políticas que describe una posible hoja de ruta para ataques militares estadounidenses e israelíes contra el programa nuclear iraní. Pablo Martínez Monsivais | AP Robert Inlakesh es analista político, periodista y documentalista, actualmente radicado en Londres, Reino Unido. Ha reportado desde y vivido en los territorios palestinos ocupados y presenta el programa "Palestine Files". Director de "El robo del siglo: La catástrofe palestino-israelí de Trump". Síguelo en Twitter: @falasteen47